De todas, la alabarda interceptor es la más pequeña. Usada por los exploradores y quizás no sea la más fuerte, por potencia de fuego, pero en su capacidad de esquivar y su agilidad no tienen rival. Es idónea para acercarse al enemigo y causarles daño que lo debiliten, y en un pis pas, la alabarda interceptor estará fuera de su alcance.
La alabarda interceptor puede llevar todo tipo de armas menos las pesadas que solo las puede llevar la coloso.
El ataque cuerpo a cuerpo de la alabarda interceptor son las dagas de doble filo que combinadas con su velocidad las convierte en una habilidad temible que además se puede encadenar indefinidamente.
Equipo:
La alabarda interceptor tiene una gran variedad de equipo dentro de su arsenal, que combinan su velocidad y su agilidad con la capacidad de infligir daño.
Asalto:
- Guja rastreadora: lanza un proyectil al enemigo más cercano.
- Bomba acida: Granada que rocía de ácido a los enemigos cercanos.
- Guja criogénica: lanza un proyectil que congela al objetivo más cercano.
- Mina de racimo: Dispara unas minas que explotan al entrar en contacto con un rival.
- Acelerón electrizante: permite moverse a gran velocidad hacia delante y deja un rastro eléctrico.
Sistemas de impacto:
- Impacto sideral: sobrecarga al contrincante con energía que explota al cabo de un tiempo.
- Estrella de plasma: Ataca a un único objetivo con un shuriken cargado de plasma. Muy eficaz a grandes distancias.
- Impacto centella: arremete contra un único adversario y si es pequeño puede aturdirlo.
- Aerosol corrosivo: descarga un chorro de ácido corrosivo que afecta a todos los oponentes que salpica.
Apoyo de alabarda:
- Objetivo condenado: señala a un objetivo y este recibe más daño del habitual, si muere mientras dura la habilidad, esta pasa a otro objetivo.
- Grito de apoyo: Elimina todos los efectos de estado de los aliados.
Habilidad definitiva:
Cuchillas letales: Esta habilidad definitiva es muy especial ya que saca a relucir la verdadera fuerza de esa alabarda. Cuando las cuchillas letales entran en acción, cercena a todos los rivales que se encuentra a su paso.
Puede que no tenga mucha armadura, pero esta carencia la suple con creces con la velocidad y la agilidad. Lo que a priori puede ser una derrota, se puede convertir en una victoria si combinamos la velocidad y la letalidad de esta alabarda.
